Soy de esas personas que se enfadan ante la frase "el cine español es una mierda" y que se arremangan para enumerar una retahíla de directores y películas capaces de desmontar tal argumento, pero los Goya me aburren. Los veo año tras año y, siempre, a la media hora de emisión me preguntó por qué no estoy tomando un vino en un bar ¡SI ES SÁBADO!
No hay nada que no arregle la voz de las reinas de España
He de decir que el año pasado las tenía todas conmigo. Ernesto Sevilla y Joaquín Reyes eran una apuesta segura al frente de ese barco tan complicado que son los Goya. Estaba segura de que nada podía empeorar el momento Dani Rovira en tacones dirigiéndose al público femenino, pero me equivoqué. Los momentos aburridos y de vergüencita ajena fueron muchos.
Este año prefiero mantener mis expectativas a raya y desconfiar del humor de Silvia Abril y Andreu Buenafuente en este contexto (perdonadme, no sois vosotros son los Goya) porque si lo hacen mal la gala quedará salvada por Rosalía y Amaia. No tengo ningún tipo de duda de que ambos números musicales salvarán la noche de cualquier momento de feminismo incómodo o chiste malo.
Amaia que cantará junto a Rozalen y Judit Neddermann interpretará una canción compuesta por Manu Guix en la que se incluyen los cuatro temas nominados a mejor canción original. Aunque se desconoce el repertorio que interpretará Rosalía lo que sí sabemos es que cantará en solitario y que no defraudará lo más mínimo. No nos engañemos, nunca lo hace. De hecho me la imagino cantando a capella y dando palmas si le falla el sonido.
Confío en el talento musical para salvar la gala de los Goya porque por este lado no hay guion posible que pueda dejarlas en mal lugar, tan solo tienen que dejar fluir su voz y talento, algo que nunca falla. Por la parte relativa a Silvia y Andreu solo espero que si tienen que sacar a la niña de Sherk para levantar la gala, que la saquen sin pudor.